Hoy en el 70 aniversario de la liberación de les poquísimes prisioneres que seguían con vida en Auschwitz-Birkenau, quiero forzar la mirada de les que me leen a recorrer ese camino que va desde el pasado al presente.
La impresión que deja visitar Auschwitz-Birkenau es imborrable. Al menos si lo haces desde una perspectiva como la mía. La extensión del lugar es incomprensible hasta que estás allí. Las enormes cifras son simples números ininteligibles hasta que te encuentras en frías salas de tamaño gigantesco llenas hasta reventar de maletas con nombres, zapatos, cepillos de dientes, gafas, pelo humano, prótesis, ropa... Filas y filas de barracas en las que todavía se siente el miedo. Un sinnúmero de fotos de personas numeradas que miran asustadas. Una infinidad de nombres de aquelles que ya no están con vida. La presencia de la muerte en cada paso.
Las imágenes históricas, que se repiten una y otra vez en los documentales y en las noticias de días como hoy, han perdido para la mayoría su fuerza. Les humanes son inconmiserables. Todo lo que no les afecta directamente no les afecta en absoluto.
¿Qué diferencia hay entre 10.000 y 100.000 muertes? ¿Qué diferencia hay entre 1.000.000 y 11.000.000? Especialmente cuando eran desconocides, cuando eran personas con las que la mayoría hoy sigue sin identificarse, cuando eran aquelles que seguimos siendo subhumanes.
Y además, como pensarán la mayoría de les idiotas que escuchen hoy la noticia, es pasado. Y por suerte, las cosas ya no son así. Porque ya se sabe, que esto del Holocausto es algo que pertenece a otra época en la que la gente era racista y xenófoba. De hecho, no eran ni todes les alemanes ni sus aliades, solo sus jefes, solo Hitler y sus secuaces. Eran les nazis, les demás no pensaban así. Eran les nazis que eran malvades por naturaleza. Y ahora ya nadie piensa así. Bueno, tal vez algunos casos muy extremos de neonazis, pero es que eses son igual de malvades, las personas normales no pensamos así.
Permitidme que vomite ante tanta estupidez.
El pasado es presente. El pasado nunca dejó de ser presente.
Lo que no es presente es nuestra comprensión del pasado, ni siquiera lo es nuestra comprensión del presente que vivimos.
¿Qué fue lo que creó aquellos campos de muerte? Todes eses ismos y fobias. El racismo. El antisemitismo y su amiga íntima la islamofobia. El sentimiento antipolaco. El antizingarismo/gitanofobia. La xenofobia. El capacitismo tanto físico como psíquico e intelectual. La persecución de la izquierda. El clasismo. La homofobia. La transfobia. El constante acoso de todo lo que se considera anormal y su clasificación como antisocial y peligroso. La toma de prisioneres en las guerras. El sexismo...
Para tode aquelle que no se ve nombrade en esta lista, el pasado es pasado. Algunes incluso niegan el holocausto. Los privilegios son invisibles para ele que los tiene. Pero para les demás el racismo sigue tan vivo como entonces. Y lo mismo se puede decir de les demás ismos y fobias.
Centrémonos en la situación de Dinamarca como ejemplo.
La Primera Ministra propagando nacionalismo. |
El crecimiento de la extrema derecha en Europa no ha dejado de avanzar en las últimas décadas. Tanto en Dinamarca como en el resto de Escandinavia esto es visible. Algunes ya tienen el poder. Otres están a un paso de conseguirlo. En todes el discurso que hace años se hubiera considerado extremo y racista ahora es parte normal del pensamiento de cualquier persona de la calle. Lo que ahora se entiende como extremo, en un par de años dejará de serlo. Para ello no hay más que abrir el periódico, encender la televisión o sencillamente darse una vuelta por cualquier ciudad escandinava. El nacionalismo exaltado no es precisamente sutil u oculto en el día a día de cualquier persona aquí. Como decía en su discurso de año nuevo hace unos días la Primera Ministra, "Dinamarca es el mejor país del mundo".
Ataque antisemita a la sinagoga de Copenhague. |
El antisemitismo siguió presente en la Europa de la posguerra. Los estereotipos antisemitas abundan en la red y en la calle, también entre les cristianes y seculares. En Dinamarca la comunidad judía registró en 2013 43 casos de antisemitismo, muchos de ellos cometidos por daneses de etnia mayoritaria. Por ejemplo, un grupo llenó los alrededores de la sinagoga de Copenhague de pegatinas con la bandera danesa y el texto "Dinamarca para les daneses" en tipografía del Tercer Reich. La sinagoga recibió amenazas de atentados con bomba (ya los hubo reales en 1985). Un anciano con kipá fue pateado hasta perder los dientes en un andén de la estación central sin recibir ayuda. Un sueco colgó una lata que simulaba contener Zyklon B (el gas del exterminio) en la verja de la sinagoga. Grupos reconocibles como judíos recibieron gritos antisemitas desde los coches que pasaban. Las lápidas de los cementerios judíos son destruidas.. Por otra parte, existe una web en danés dedicada a la propaganda antisemita que da escalofríos leerla. Y en Facebook ya mejor ni meterse.
Del otro tipo de ataque contra personas de etnias semitas ya ni qué decir cabe, tendría para escribir durante toda una vida. La islamofobia se extiende por Occidente como el fuego. Y Dinamarca es y ha sido desde el inicio de la nueva ola nacionalista europea antiárabe y antimusulmana, uno de sus propulsores. El número de ataques motivados por islamofobia es incontable. Y no solo les neonazis cometen estos ataques. Por supuesto, el discurso islamófobo se encuentra en TODOS y cada uno de los partidos políticos del país, además de TODOS los medios de comunicación. Ser entendido aquí como musulmán, como árabe, como persona de Oriente Próximo, Medio, Pakistán o Magreb (da igual si lo eres o no) es una carta blanca a que te maltraten de forma constante.
Publicidad antipolaca del mayor sindicato danés. |
El sentimiento antipolaco que nutría parte de la ideología nazi no se quedó aparcado en algún rincón perdido de la historia europea durante la guerra. En este país les polaques y en extensión, cualquier persona considerada como "europea del este", tiene que aceptar que en su día a día se le utilice como ejemplo de ladrón, persona que viene a quitar el trabajo, a aprovecharse del estado de bienestar, etc. Los estereotipos anti-europee-del-este crecen por año. De hecho en el último par de años incluso se ha creado un nuevo vocablo, østarbejder o "trabajador-del-este", en el que se puede verter toda la mierda que a une ciudadane de vida media de este país se le antoje.
El trato a las personas gitanas y romaníes y la visión que se tiene de ellas no difiere en la Europa de hoy al trato y visión que se tenía durante la época nazi. Les romaníes hoy siguen siendo expulsades de los países, incluido de Dinamarca, sin otro motivo que su etnia. Se siguen creando campos en los que se les mete, solo que ahora se les llama "ciudades de integración" (como en Francia). La situación socioeconómica en la que la mayoría vive es desesperante. Les habitantes romaníes locales son hostigados en un intento de conseguir que abandonen su cultura y "se integren". Sus hijes son colocades en escuelas especiales para que no se mezclen con les payes, como sucedió con la mayor comunidad romaní en Dinamarca situada en Helsingør hace un par de años. En cuanto a les romaníes inmigrantes, sencillamente se les detiene arbitrariamente, se les niegan sus derechos y, como en el resto de Europa, se les culpa de crear criminalidad e inseguridad ciudadana mientras se les mantiene en la más extrema pobreza.
Sobre la xenofobía de este país llevo escribiendo siempre, y solo hay que darse una vuelta con los ojos mínimamente abiertos por aquí, o si no se puede, visitar las webs del partido nacionalista Dansk Folkeparti que en el momento presente es el que encabeza todas las listas en intención de voto, para ver que en Dinamarca la política antiextranjere y antirrefugiade no es algo del pasado nazi, no. Es algo muy presente. De hecho, el tema más presente en toda la política nacional de forma constante en las dos últimas décadas.
Grupo de refugiades kurdes en huelga de hambre por su situación en un campo de refugiades en Dinamarca. |
No hay que olvidar de hecho que Dinamarca, como gran parte de la Unión Europea, tiene campos de refugiades y campos de inmigrantes cuyas condiciones a veces no difieren mucho de lo que la mayoría esperaría de los campos de otra época pasada.
La diversidad funcional, llamada discapacidad por la mayoría, en este país se enfrenta de una forma que en mi opinión no ha mejorado mucho de la ideología nazi: eliminación, y si no es posible, ocultación. Así, se hace un screening de todes les no-nacides para eliminar a les no-capaces. Una no muy nueva forma de eugenesia. Les que llegan a existir, son ocultades en instituciones alejadas de los ojos de la mayoría. Y cuando se llega a anciane y/o no se es funcional, los hospitales utilizan protocolos especiales que incluyen no realizar reanimación cardiopulmonar en el caso de parada cardíaca. Las personas con eso que llaman enfermedades psíquicas pierden su libertad y en bastantes casos también la vida en circunstancias más que dudosas en esas instituciones.
La izquierda que realiza una verdadera oposición al régimen es acallada de formas poco sutiles. Cualquier persona que por motivo de ideología realice una acción política de protesta corre el riesgo de ser juzgada como delincuente y encarcelada. Si además la ideología del grupo minoriatario no apoya la ideología mayoritaria (por ejemplo si se es anticapitalista, anarkista u okupa) además se corre el riesgo de ser juzgade bajo la ley especial creada para combatir el terrorismo que, como en tantos otros países, en realidad es una bella forma de saltarse a la torera los supuestos derechos y libertades civiles. Eficaz arma de represión.
Ser pobre, aquí como en cualquier otro sitio, es visto con sospecha. "Algo habrás hecho". En consecuencia, tu comportamiento se considera como antisocial. Y ya se sabe, pobreza y antisocialidad "es igual a delincuencia". ¿Y qué se hace con les delincuentes? Se les penaliza. Y si es necesario, se les recluye, en prisiones. De vuelta al campo.
Campaña para promover la denuncia de los crímenes de odio por homofobia. El texto dice: "¿Te gustan los maricas con los ojos azules(=morados)?" |
Sobre homofobia y transfobia en este país también he hablado mucho en mis blogs. De cara al público, la estrategia nacional ha cambiado, ahora les daneses se venden como tolerantes e incluyentes. Pero, la realidad del día a día de las personas no heterosexuales y no cisgénero no deja dudas. Los ataques homófobos y tránsfobos son muchos. De hecho, este es uno de los países con una de las estadísticas más altas. En 2008 estimaba el propio Ministerio de Justicia que la cantidad de ataques era 12.000 en un año. Por otra parte, el único estudio que hay hasta el presente sobre las condiciones de vida de las personas LGBT tampoco arroja estadísticas que animen: pobreza, enfermedad, discriminación, menor educación, menor seguridad, aislamiento, exclusión social, esperanza de vida más corta.
En cuanto a las personas que son consideradas como asociales, la línea sigue el mismo camino que con las personas que son consideradas como extremistas en cuanto a sus ideas políticas. Persecución no sutil. Exclusión social. Y en muchos casos encarcelamiento.
El odio por motivos religiosos no solamente afectó a les judíes y musulmanes durante la era nazi. Algunos grupos cristianos, en particular les testigos de Jehová, también fueron perseguides. El odio a lo diferente llega a esos extremos, del mismo modo que lo hace hoy. Les cristianes no protestantes también sufren discriminación en la Dinamarca actual.
Otra cosa que la gente suele olvidar es que Dinamarca es un país en guerra. Y en toda guerra hay prisioneres. No es un secreto que Dinamarca colabora con Estados Unidos y que ambos países se saltan las leyes internacionales como les da la gana en su "lucha contra el terror". Me gustaría a mí que me explicaran la gran diferencia que hay entre un campo de prisioneres de la Segunda Guerra Mundial y uno actual.
He dejado para el final el racismo, el odio motivado por lo que se entiende como raza. El racismo está muy vivo en Europa. Las personas no consideradas como blancas siguen siendo víctimas constantes de crímenes, de marginación, de exclusión social, de discriminación legal y administrativa... El racismo danés se basa en la misma ideología nazi, de supremacía blanca, de supremacía aria. Ser "blanquezine" no es suficiente, hay que ser "verdaderamente blanque". Y eso solo se es en el norte de Europa. El color de los ojos, el color del cabello, la tonalidad de la piel, el tamaño de la nariz, de los labios, todo es utilizado para definir a les verdaderes habitantes por derecho de este país. Y no se queda en el cuerpo, también la vestimenta, los productos que se consumen, la música que se escucha, la forma en la que se decora la casa en la que se vive, todo es objeto de escrutinio para incluirte en ese "nosotres" o "les otres".
No hace ni dos semanas que la televisión estatal aquí, Danmarks Radio, que hoy de forma hipócrita conmemora el día, emitió en uno de los capítulos de la serie documental más horrible que he visto hasta la fecha aquí, una secuencia de tres minutos que hizo llorar a todes les que la estábamos viendo.
Estas tres personas, situadas como criminales, son descritas paso por paso en sus características raciales. Son "les otres" que "nosotres" debemos aprender a identificar, porque a veces "son difíciles de descubrir", incluso algunes "en principio son caucásiques". Nada en esa secuencia se diferencia de la propaganda nazi, ni la terminología, ni las intenciones. El mismo Joseph Goebbels hubiera aplaudido con fervor.
El uso de la propaganda es justamente un punto en el que Dinamarca ha aprendido mucho de su colaboración (supuesta ocupación) con la Alemania nazi. Durante décadas Escandinavia ha extendido un rumor sobre sí misma que el resto del mundo se ha tragado, mientras al mismo tiempo en casa se cometían crímenes dignes de les propies nazis. Esa Escandinavia igualitaria, tolerante, diversa, punto de acogida de les refugiades del mundo, pacífica, neutral, bella, modélica, guarda en su historia reciente muchos aspectos que se ocultan en la propaganda que recibe el resto del mundo. ¿Ejemplos?
- La esterilización forzosa de las personas romaníes y con diversidad funcional entre 1934 y 1977 en Noruega.
- La esterilización forzosa de personas romaníes, samis y con diversidad funcional entre 1934 y 1976 en Suecia.
- La esterilización forzosa de las personas trans* en Suecia hasta 2013, en Dinamarca hasta 2014, todavía presente en Noruega.
- La experimentación social en puro estilo Auschwitz con groenlandeses en 1952 por parte de Dinamarca.
- La presente experimentación médica de caras drogas medicinales para el tratamiento de la diabetes en países como India por gigantes empresas farmacéuticas danesas en condiciones muy cuestionables.
- La creación de campos de refugiades donde se violan los derechos de estas personas durante períodos que a menudo exceden una década.
- La falta de reparación de los crímines cometidos contra las excolonías, y la falta de enseñanza de el colonialismo y esclavismo escandinavo en las escuelas.
- La existencia en Dinamarca de leyes de limpieza racial desde 1929 (mucho antes de la ocupación nazi) y de un Instituto de Eugenesia que siguió funcionando hasta 1956 (mucho después del fin de la ocupación).
- La oferta estatal de forma sistemática en Dinamarca desde 2003 a tode embarazade de valoración de riesgo de error genético o enfermedad seguida de invitación al aborto.
- Expulsiones en los últimos años de ciudadanes de la Unión Europea (y por tanto con derecho a buscar trabajo en Dinamarca) por el sencillo hecho de ser romaníes.
- Del mismo modo expulsiones danesas de refugiades polítiques a países en los que no se garantiza de ningún modo su seguridad.
- Denegación ilegal de la nacionalidad danesa a refugiades sin nacionalidad nacides y crecides en Dinamarca.
La hipocresía de la propaganda danesa no tiene fin. Para fuera Dinamarca es constante guardiana de las libertades civiles y lucha contra la homofobia y el antiseminitismo de países como Rusia o Turquía. Para dentro construye una acusación constante de musulmanes, inmigrantes y refugiades por sus supuestes homofobia y antisemitismo al mismo tiempo que las estadísticas muestran que el mayor número de crímenes de odio los cometen las personas de mayoría étnica danesa.
70 años después Europa no ha aprendido nada.
Los genocidios no se acabaron allí. ¿Qué pasa con Darfur o con les yazidis? La eugenesia no era algo exclusivo de les nazis. ¿Dónde están todes esas personas con Síndrome de Down? ¿Por qué las poblaciones romaníes han disminuido en una parte de Europa?
Las consecuencias del holocausto tampoco se quedaron en 1945. ¿Dónde están las reparaciones al pueblo romaní, a les prisioneres no judíes? ¿Por qué se pueden seguir comprando medicamentos a Bayer que experimentaba con prisioneres en Auschwitz? ¿Por qué la marca Saurer que creó a petición los camiones que funcionaron como cámaras de gas en Chelmno siguió vendiendo camiones hasta 1982 y hoy todavía existe como parte de la industria textil? ¿Por qué no hay boicots ni es bien conocido que Kelloggs, Krupp, Volkswagen, Mercedes-Benz y Ford se beneficiaron de la existencia de campos de concentración?
Las persecuciones por motivos raciales, étnicos, religiosos, políticos, eugénicos, etc. no se acabaron en la Alemania nazi. Al contrario, somos sus herederes. Nuestras sociedades y sus prejuicios se nutren de su historia.
Tengo miedo. Si viviera lo suficiente sería carne de crematorio.